Cristian Sevillano
Pensando en las palabras de Jesús cuando dijo en Mateos 17:20,
“Por la poca fe que tienen- les respondió- Les aseguro que, si tuvieran fe tan pequeña como un grano de mostaza, podrían decirle a esta montaña: Trasládate de aquí para allá, y se trasladaría. Para ustedes nada sería imposible.”
Creo que la primera montaña que necesitamos mover de nuestra frente es la montaña de la DUDA. La DUDA ha sido la montaña que siempre ha interferido en nuestra relación con Dios, porque Dios nos da todo, pero somos nosotros con nuestra fe tan diminuta que interrumpimos la obra de Dios en nuestras vidas.
Por muchas partes por las que he pasado me encuentro con cristianos que aún tiene DUDA de la GRACIA de Dios, personas con muchos años caminando con Jesús aún se preguntar: ¿Es para mí? ¿Enserio? ¿Es gratis?
Dudar del AMOR y GRACIA de Dios nos puede costar nuestra propia SALVACION, porque ya que la SALVACION es de GRACIA porque no simplemente aceptarla y confiar fielmente que Dios tiene el poder de salvar a todos sin importar su pasado siempre y cuando acepte a Cristo como SEÑOR y SALVADOR de su vida y se deje moldear cada día por Él.
La DUDA es una de las armas que satanás más una para atácanos a todos aquellos que hoy en día tentamos vivir una vida SANTA y PURA, satanás quiere hacernos sentir culpables de nuevo.
Efesios nos dice que somos salvos por GRACIA, mediante la fe, ósea sin fe podemos perder el regalo mas grande Dios dado al hombre.
“Porque por gracia ustedes han sido salvados mediante la fe; esto no procede de ustedes, sino que es el regalo de Dios.”
Efesios 2:8
Esto altera el veredicto de culpable para inocente. Ofrece lo que ningún ser humano merece. Transforma lo inútil en una obra prima. El transforma un alma manchada de pecado en una consciencia sin culpa delante de DIOS. Anula el castigo merecido y lo transforma en una corona de VIDA. Estoy hablando de la GRACIA de Dios.
¿Usted tiene certeza de lo que Dios hace? Yo pensé en mi corazón, cuando recibí el veredicto después de confesar mis pecados. Después de caminar por muchos años lejos de DIOS y vivir pecaminosamente, yo necesitaba VOLVER a EL. Desperdicie el cuerpo y la mente que Él me dio, y manche mi alma con el pecado.
Yo volví esperando encontrar descanso para mi alma y mi cuerpo, de alguna forma buscaba alterar o pagar el mal que había hecho.
No en tanto, Él dice: Tu eres INOCENTE, recibe la GRACIA de Jesucristo.
En aquel día, mi vida cambio. Entregue los trapos viejos y sucios que vestía y Dios me dio la JUSTICIA y la SANTIDAD de Cristo Jesús como una vestimenta. (Romanos 5:17) A partir de ese momento, mi espíritu entendió que Jesús pago en PRECIO de mi paz (Isaías 53:4-5) para ser restaurado gradualmente en mi cuerpo y mente.
Dios coloco en mi la alegría de su SALVACION e la alegría del ESPIRITU SANTO, después de recibir todo eso, por algún tiempo tente pagar a Jesús lo que Él había hecho por mí, pero para mi sorpresa, Él me dijo que no había NADA a pagar, apenar para RECIBIR.
Amigo no intente descifrar el concepto de GRACIA de Jesucristo, apenas recíbala como el mayor regalo que alguien podría ofrecerle.
No importa si satanás su enemigo, su familia o alguna otra persona recuerdan lo culpable que era o el mal que usted antes hacía.
JESUS en una CRUZ cambio el veredicto y lo declaró INOCENTE.