Piñas en el jardín

Maribel Preciado   Al poco tiempo de haber tenido el privilegio de adoptar a nuestros preciosos hijos Giancarlo e Isabella, el Señor nos bendijo con la oportunidad de comprar una casa, “el sueño americano” se hacia realidad, hijos, casa, y una vida sirviendo a Dios. Carlos tuvo siempre la inquietud de sembrar, así que tratamos […]