Lugares por donde andar

 J. Omar Palafox

Dios nos ha dado una oportunidad de ser como el en su capacidad de ir al mundo llevando buenas noticias. El apóstol Pablo dice en 1 Corintios 2:10 – “Pero Dios nos las reveló a nosotros por medio del Espíritu, porque el Espíritu lo examina todo, aun las profundidades de Dios.” En una casa siempre hay puertas externas para poders conectar afuera y viceversa. ¿De qué manera nos ayuda el Espíritu a buscar “las cosas profundas de Dios“?

Ahora, Jesús nos dio una imagen completa de Dios y demostró cómo podemos experimentar vitalidad y plenitud en nuestra vida con Dios (Colosenses 2: 9, Juan 10:10). La Iglesia histórica como cristianos, a pesar de sus divisiones y diferencias, ha mantenido las características centrales de la vida de Cristo a través de lo que ahora llamamos tradiciones.

En conjunto, estas tradiciones nos ayudan a imaginar una vida espiritual equilibrada. Sirven como una guía para ayudarnos a asumir la vida de Jesús, a ser como nosotros mismos, y como resultado a ser transformados de adentro hacia afuera. Todos somos el resultado de muchos hombres y mujeres que han hecho un gran esfuerzo de ser Iglesia atreves de los siglos. ¿A través de quién reveló el espíritu santo verdades profundas en el primer siglo?

            Pablo nos dice “a cada uno se le da la manifestación del Espíritu para el bien común” (1 Cor. 12: 7). Esto se convierte en un vehículo principal para su orientación en nuestras vidas. Los regalos o dones del espíritu son de suma importancia para el cristiano. Para poder ser parte del llamado de Dios y de ser parte de un pasado tenemos que explorar nuevos caminos. En algún momento la iglesia empezo hacer lo que ahora vemos como normal. Por ejemplo, los cantos que usamos alguien los hizo para que ahora los cantamos. Porque no empezar a buscar nuevos caminios por los cuales Dios pueda en su Espiritu llevarnos a ser mas como Jesus.

            A lo largo de las Escrituras vemos que Dios guía a su gente en la misión al poner cargas especiales en sus espíritus. Cuando Nehemías se fue a Jerusalén para reconstruir sus muros, no tenía una orden de Dios. Simplemente dijo que Dios lo había “puesto en su corazón” para hacerlo (Nehemias 2:12). Tambien cuando Pablo llegó a Atenas, Lucas registra que su espíritu fue “provocado” dentro de él por la idolatría en Atenas (Hechos 17:16). ¿Cómo opera el espíritu santo para aclarar las cosas en nuestros días?

Evidentemente, tomó esta provocación como una dirección para quedarse y predicar el evangelio allí. Más adelante en su ministerio identificaría una santa “ambición” que Dios había puesto en su corazón para predicar a Cristo solo donde nunca había sido nombrado (Romanos 15:20). Hasta entonces, su ministerio había sido amplio (debatir el evangelio, edificar las iglesias en todas partes), pero el Espíritu luego redujo el enfoque de su ministerio. A lo largo de nuestras vidas (a veces) experimentamos un “descontento sagrado” acerca de una situación particular o la presión de una promesa específica de Dios a nuestro contexto. Esta es a menudo la invitación del Espíritu para perseguir un camino particular.

En estos días de fin de año te invito que veas a el Espiritu Santo como un generoso dador de dones para que como en una casa podamos dejar que nos lleve a lugares por donde andar. Solo por el Espiritu podemos ser innovadores, creadores, y creadores de nuevas tradiciones en la iglesia. ¿Qué puedes hacer para beneficiarte del papel del espíritu en tu búsqueda de Jesus?