Esta semana solo hay 2 desafíos, pero ambos se centran en nuestro compromiso mutuo.

  1. Di palabras de aliento
    Poner en practica las instrucciones
    “Anímense unos a otros cada día, mientras sea llamado hoy” (Heb. 3:13), y
    “Alentémonos unos a otros…” (Hebreos 10:25)
    empujando a alguien más cerca de Dios cada día.
    Recuerda que, “como hierro con hierro se aguza, así uno se aguza a otro” (Pr. 27:17).
    Elige sabiamente tus palabras esta semana, recordando que,
    “Todos sean prontos para escuchar, tardos para hablar y tardos para enojarse” (Santiago 1:19).
    Pasa esta semana siendo más intencional con tus palabras.
    No chismes, y habla solo palabras que animen a otras personas.
    Como dice Efesios 4:29: “Ninguna palabra profana salga de vuestra boca, sino sólo la que sea útil para la edificación de otros según sus necesidades, a fin de que beneficie a los que escuchan”.
    “Si es correcto hablar, habla de lo que beneficiará espiritualmente a otros. Los malos hábitos y el descuido de nuestro progreso espiritual contribuyen mucho a nuestra charla interminable”.
    (Thomas A Kempis en Foster y Smith, 153).
  2. Invertir en la comunidad de la iglesia cristiana intergeneracional
    Ir a la iglesia. Asista a una asamblea cristiana e invierta en relaciones cuando esté allí; específicamente, invierta en relaciones con personas que no sean de su edad.

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